Preguntas frecuentes sobre el HPV

El cáncer de cuello de útero (o el cáncer de cuello uterino) es un cáncer que se desarrolla en el cuello del útero. El cuello uterino es la parte inferior del útero (matriz) que se abre hacia la vagina.

La mala noticia es que todavía muchas mujeres desarrollan un cáncer de cuello uterino y fallecen. Se calcula que globalmente, una de cada 123 mujeres desarrollará cáncer de cuello de útero si se evalúan solamente con la citología. Esto, no obstante, puede mejorar. Además de realizar regularmente un PAP, a todas las mujeres candidatas, se puede mejorar la prevención del cáncer de cuello de útero con la prueba del VPH y con las vacunas contra el VPH en las niñas de 11 años

Se ha demostrado que la causa del cáncer de cuello de útero son los tipos de “alto riesgo” del virus del papiloma humano (VPH). La mayoría de las mujeres se infectará con uno o más tipos de “alto riesgo” del VPH (potencialmente cancerígenos) al menos una vez en su vida. Normalmente el sistema inmunológico del cuerpo combate la infección, y la mayoría de las mujeres que tiene el VPH no tendrá nunca ningún problema a consecuencia de la infección. Sin embargo, en algunas mujeres la infección no desaparece. Si el virus permanece en el cuerpo durante mucho tiempo, las células del cuello uterino pueden comenzar a cambiar e incrementa el riesgo de que se desarrolle un cáncer de cuello de útero.

HPV no es un virus nuevo y la mayoría de las personas que han estado sexualmente activas, han tenido HPV en algún momento de su vida.

El HPV se propaga mediante el acto sexual y puede causar una infección en el cuello uterino. La infección por lo general no dura por mucho tiempo debido a que su cuerpo es capaz de combatirla. Si el HPV no desaparece, el virus pudiera causar cambios en las células del cuello uterino y convertirlas en células precancerosas. Las células precancerosas no son cáncer Algunas veces las células precancerosas pudieran convertirse en cáncer si no son descubiertas y tratadas.

Debido a que el HPV es tan común, cualquier mujer que haya tenido sexo puede padecer cáncer del cuello uterino. Sin embargo, la mayoría de las mujeres que contraen HPV no padecen de cáncer del cuello uterino. Las mujeres que se hacen las pruebas de Papanicolaou tan frecuentemente como deberían, tienen menos probabilidades de padecer cáncer del cuello uterino.
Existen  probabilidades  mayores de padecer cáncer del cuello uterino relacionadas con:

  • Dar a luz a muchos hijos.
  • Tener muchas parejas sexuales.
  • Tener el HPV y éste no desaparece
  • Mantener la primera relación sexual a una edad temprana.
  • Fumar cigarrillos.
  • Usar píldoras anticonceptivas orales(“la píldora”).
  • Tener el sistema inmunitario debilitado. Tener HIV o sida (AIDS).
  • Las mujeres que no se hacen las pruebas de Papanicolaou o que no se las hacen tan frecuentemente como deberían

¿Si no estoy teniendo sexo, necesito hacerme las pruebas de Papanicolaou?
Deben seguir realizando el PAP. Las mujeres que estuvieron activas sexualmente en el pasado pueden padecer de cáncer del cuello uterino.

Cualquier hombre o mujer que haya tenido sexo puede contraer HPV ya que se propaga mediante el acto sexual. Los condones no siempre protegen contra el HPV, pero son muy útiles en la protección contra otras infecciones que se pueden propagar mediante el acto sexual.

No. La mayoría de las personas nunca sabrá si tienen HPV. Sin embargo, si el HPV no desaparece por sí solo, puede causar cambios en las células del cuello uterino. Estos cambios por lo general aparecen en la prueba de Papanicolaou.

No hay tratamiento para el HPV que causa cambios en las células del cuello uterino. Sin embargo, la mayoría de las infecciones con HPV desaparecen sin tratamiento.
Existen tratamientos para los cambios celulares en el cuello uterino causados por el HPV. Si su prueba de Papanicolaou muestra cambios en el cuello uterino, su doctor o  hablará con usted sobre esos tratamientos, si usted necesita de ellos.

En Argentina se incorporó  al Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles, con carácter gratuito y obligatorio, la inmunización con la vacuna para VPH a todas las niñas de ONCE años de edad, e intégrase la misma al Calendario Nacional de Inmunizaciones”. Consta en la Resolución  563/2011, del Ministerio de Salud de la Nación.
La vacuna contra el VPH que adquirió Argentina es bivalente, inmuniza contra los genotipos 16 y 18, que representan el 77 por ciento de los genotipos de VPH de alto riesgo para producir cáncer. Además, contiene un adyuvante que favorece la protección cruzada contra otros genotipos, por lo que alcanza una cobertura del 93 por ciento.
Está indicada para la prevención de lesiones genitales precancerosas (cervicales, vulvares y vaginales) y cáncer cervical relacionados causalmente con ciertos tipos oncogénicos del VPH. También está indicada para la prevención de verrugas genitales externas (condiloma acuminata) relacionadas.  El esquema de inmunización será de TRES (3) dosis al inicio CERO (0), al mes o DOS (2) meses de la primera dosis y a los SEIS (6) meses de la primera dosis.

Una prueba de Papanicolaou no puede indicar si usted tiene o tuvo HPV. Por lo general, indica si usted tiene cambios en las células del cuello uterino que podrían ser causados por el HPV. Esta es la información más importante que usted y su doctor necesitan saber.
Ninguna prueba es perfecta: si la prueba de Papanicolaou no encuentra cambios celulares en el cuello uterino, entonces, por lo general, estos cambios serán detectados durante la próxima prueba de Papanicolaou. Por lo tanto, es importante hacerse regularmente el PAP.

Sí, hay una prueba para detectar el HPV, llamada prueba HPV, aunque la misma NO está incluida en el PMO y no tiene cobertura por las Obras Sociales .La prueba HPV puede hacerse al mismo tiempo que la prueba de Papanicolaou, con la misma o una segunda muestra, aunque el resultado sea positivo no existe tratamiento específico.

La decisión es suya. Es posible que usted quiera saber si tiene HPV. Algunas mujeres prefieren no saberlo.

El PAP es un procedimiento para recoger células de la superficie del cuello uterino y la vagina, Las células se examinan bajo un microscopio para determinar si son anormales.  Se trata de una prueba sencilla que no produce dolor  y que dura sólo unos minutos

  • Las mujeres se recuestan en la camilla ginecológica.
  • Un profesional introduce un pequeño aparato (espéculo) en la vagina.
  • Se extrae con una espátula de madera una muestra de células del cuello del útero.
  • Se coloca la muestra en un vidrio para que pueda ser analizada en un laboratorio.

Es muy efectivo. Se ha comprobado que el PAP realizado dentro de un programa de prevención organizado reduce en un 80% la incidencia y mortalidad del cáncer de cervix.

El Programa Nacional recomienda que especialmente todas las mujeres entre 35 y 64 años se realicen un PAP. Asimismo las mujeres mayores de 64 años que nunca se hayan hecho un PAP también deben hacerlo.

Si durante dos años seguidos el PAP dio negativo, se recomienda hacer un PAP cada tres años.

Si. El riesgo de desarrollar cáncer de cuello de útero aumenta con la edad. La mayor incidencia y mortalidad por esta causa se encuentra en las mujeres mayores de 50 años, por eso es importante que sobre todo las mujeres después de la menopausia se hagan un PAP.

Significa que no se detectaron lesiones en el cuello del útero. Las células están sanas.

Significa que hay algún tipo de lesión que hay que controlar y en caso que sea necesario, tratar. Las lesiones de bajo grado en general no necesitan tratamiento. Se recomienda seguimiento con un PAP cada 6 meses. Para las lesiones de alto grado existen diferentes tipos de tratamiento. Debe consultarse con el médico cada caso particular.

Si. La colposcopÍa forma parte del examen rutinario: PAP+ COLPO. Otros procedimientos complementarios, dependerán de los resultados obtenidos del examen  básico.

  • Colposcopía: procedimiento mediante el cual se usa un colposcopio (un instrumento con aumento y luz) para determinar si hay áreas anormales en la vagina o el cuello uterino. Se pueden extraer muestras de tejido para observarlas bajo un microscopio y determinar si hay signos de enfermedad.
  • Biopsia: si se encuentran células anormales en una prueba de PAP, el médico puede realizar una biopsia. Se toma una muestra de tejido del cuello uterino para que un patólogo la observe bajo un microscopio y determine si hay signos de cáncer. Una biopsia en la que solo se extrae una pequeña cantidad de tejido se puede realizar  en el consultorio del ginecologo. Perro puede ser necesario  que se le practique una biopsia de cono cervical (extracción de una muestra más grande de tejido cervical, en forma de cono) para lo cual requerirá  un quirófano.

El cáncer de cuello uterino por lo general evoluciona lentamente con el paso del tiempo. Antes de que el cáncer aparezca en el cuello uterino, las células del cuello  atraviesan cambios llamados displasias o sea células  que sufren cambios y no son normales. Esas  células displásicas pueden evolucionar a células cancerosas, comenzar  a crecer localmente  y con el tiempo diseminarse más profundamente en el cuello uterino y las áreas cercanas