La cantidad de nicotina, de sustancias carcinogénicas y de otras sustancias tóxicas presentes en los cigarrillos, en los cigarros puros y en otros productos de tabaco varía considerablemente. En un cigarrillo (el cual contiene menos de 1 gramo de tabaco), el contenido de nicotina puede variar entre 13,7 y 23,2 miligramos por gramo de tabaco seco. En un cigarro puro (el cual contiene hasta 20 gramos de tabaco), el contenido de nicotina puede variar entre 5,9 y 335,2 miligramos por gramo de tabaco.

La forma en la cual una persona fuma el tabaco es más importante que la cantidad de nicotina presente en el producto de tabaco para determinar cuánta nicotina entra en el cuerpo. La nicotina es absorbida en los pulmones y a través del revestimiento de la boca. La mayor cantidad de nicotina es absorbida al inhalar el humo en los pulmones y al tomar fumadas frecuentes y profundas.

Sí. El humo de tabaco contiene sustancias químicas que son dañinas tanto para los fumadores como para quienes no fuman. Respirar sólo un poco de humo de tabaco puede ser perjudicial. Se sabe que de las 4 000 sustancias químicas presentes en el humo de tabaco, 250 son dañinas para la salud. Ejemplos de dichas sustancias son: el cianuro de hidrógeno, el monóxido de carbono y el amoniaco.

De las 250 sustancias químicas dañinas presentes en el humo de tabaco se ha descubierto que más de 50 causan cáncer. Se sospecha que formaldehídoa- y benzopirenotrinitrotolueno son otras sustancias químicas tóxicas en el humo de tabaco causan cáncer.

El humo de tabaco en el ambiente conocido también como tabaquismo involuntario o pasivo es la combinación del humo de la corriente “lateral o secundaria” (el humo que resulta de la combustión espontánea de un producto de tabaco) y el humo de la corriente “principal” (el humo que exhala el fumador) Los investigadores han clasificado al humo de tabaco en el ambiente como cancerígeno (sustancia que causa cáncer) humano. Inhalar humo de tabaco en el ambiente causa cáncer en adultos que no fuman. Se estima que vivir con un fumador aumenta la posibilidad de cáncer de pulmón en quienes no fuman en un 20% a 30% .

El humo de tabaco en el ambiente causa enfermedades y muerte prematura en adultos no fumadores y en niños. Se estima que la exposición al humo de tabaco pasivo aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas en 25% a 30% . Asimismo, se piensa que dicha exposición causa más de 46 000 muertes por enfermedades cardíacas en Estados Unidos cada año. Los niños expuestos al humo de tabaco en el ambiente tienen un alto riesgo de presentar síndrome de muerte infantil súbita, infecciones de oídos, resfríos, neumonía, bronquitis y de asma más grave. Igualmente, la exposición al humo de tabaco en el ambiente atrofia el crecimiento de los pulmones en los niños y hace que tosan, que tengan episodios de sibilancia y que sientan que les falta el aire.

Se ha comprobado que la exposición involuntaria a este humo aumenta los riesgos para desarrollar enfermedades en familiares, compañeros de trabajo y amigos de los fumadores.

Los cónyuges tienen más riesgo de desarrollar:

• Bronquitis
• Cáncer pulmonar, bucal y de mama, entre otros
• Infarto al miocardio
• Enfermedad cerebro-vascular
• Enfisema

Las mujeres embarazadas tienen mayor probabilidad de:

• Abortar espontáneamente
• Que su hijo tenga bajo peso al nacer
• Aumento de enfermedades congénitas como el labio leporino

Los hijos de padres fumadores pueden sufrir:

• Consecuencias por tener bajo peso al nacer
• Crisis de asma, más frecuentes y más severas
• Infecciones respiratorias y en ocasiones problemas en el oído
• Mayor riesgo del Síndrome de Muerte Súbita del Recién Nacido o muerte de cuna
• Predisposición a bronquitis y neumonía

La exposición constante al humo de tabaco en el área de trabajo ocasiona disminución de oxígeno en sangre, lo que puede:

• Alterar o disminuir la capacidad de concentración de los trabajadores .
• Dolores de cabeza
• Problemas respiratorios
• Irritación en los ojos, garganta y/o comezón en la nariz

• Abstenerse de fumar, respetar los señalamientos y los espacios de no fumar
• Ubicarse en las áreas designadas para fumar, o hacerlo en lugares abiertos
• No fumar en presencia de embarazadas, niños, personas con padecimientos cardiacos o respiratorios, y las de la tercera edad
• Consultar con los demás la posibilidad de fumar y aceptar la respuesta cuando sea negativa
• Reconocer que el tabaquismo es una adicción y, como tal, debe ser atendida
• Decidirse a dejar de fumar

Informarse sobre las alternativas para dejar de fumar (Terapia de Reemplazo de Nicotina y otros medicamentos, programas de ayuda mutua, terapias psicológicas y tratamiento médico).

• Solicitar cordialmente a los que fuman, que no lo hagan en los espacios que comparten
• Conocer las disposiciones legales respecto a la protección del no fumador, para poder ejercer sus derechos
• Orientar a los menores de edad respecto a los daños que provoca fumar, para evitar que se inicien en este hábito
• Exigir que se respeten las áreas de no fumar y, en su caso, que se designe el área para fumadores
• Sugerir a la persona que fuma que busque ayuda para dejar de fumar
• Apoyar y alentar al fumador en el proceso de abandono de la dependencia al tabaco

• Instalaciones educativas, todas las unidades médicas u hospitalarias y clínicas de los sectores público, social y privado que constituyen el Sist. Nac. de Salud
• Áreas designadas en restaurantes y otros establecimientos comerciales
• Aeropuertos, centrales camioneras, estaciones de ferrocarril, terminales e instalaciones portuarias
• Transporte público, líneas aéreas nacionales y transportación terrestre
• Bancos y oficinas de atención al público
• Cines, teatros y otros centros de entretenimiento o recreación

En estos edificios e instalaciones se destinará un área para que los trabajadores, visitantes o usuarios, que así lo deseen, puedan fumar. Ésta deberá:

• Estar aislada de las áreas de trabajo
• Tener ventilación hacia el exterior, o un sistema de extracción o purificación del aire
• Ubicarse, de acuerdo con la distribución de trabajadores por piso, área o edificio
• Estar identificada como área de fumar, con señalización clara y visible

Ubicala !!! Esta área no podrá utilizarse como sitio de recreación.

Fumar daña prácticamente todo órgano del cuerpo Fumar es una causa principal de cáncer y de muerte por cáncer. Dicho hábito causa cáncer de pulmón, de esófago, laringe, boca, garganta, riñón, vejiga, páncreas, estómago y de cérvix, así como también leucemia mieloide aguda . Asimismo, fumar causa problemas cardíacos y ACV, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (bronquitis crónica y enfisema), fracturas de cadera por coadyuvancia en la hipocalcemia, y cataratas.

Quienes fuman presentan un riesgo más alto de padecer neumonía y otras infecciones de las vías respiratorias. Las mujeres embarazadas que fuman corren un riesgo mayor de que sus bebés nazcan prematuramente o con peso anormalmente bajo. La mujer que fuma durante el embarazo o después de él aumenta el riesgo de que su bebé muera por síndrome de muerte infantil súbita.

Los hombres que fuman tienen mayor riesgo de presentar disfunción eréctil. De las muertes producidas por el tabaco, cerca de 40% son por el cáncer, 35% son por enfermedades cardíacas y accidentes cerebro vasculares, y 25% son por enfermedades pulmonares. Fumar es la causa principal de muertes prematuras y prevenibles en el país. Sin tomar en cuenta la edad, los fumadores pueden reducir considerablemente su riesgo de enfermedades, incluso de cáncer, al dejar el hábito.